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Contabilidad vs. Derecho: ¿Cuál es la diferencia?

La contabilidad y el derecho son dos profesiones que atraen a muchos estudiantes universitarios. Cada campo ofrece un fuerte potencial de ingresos, movilidad ascendente y una variedad de trayectorias profesionales dentro de la profesión.

Los contables y los abogados pueden encontrar puestos en el sector público (una agencia del gobierno federal, estatal o municipal) y en el sector privado (empresas y organizaciones sin ánimo de lucro). Dentro de la práctica privada, existen dos tipos básicos de entornos laborales: “externo”: en una empresa, compuesta por otros profesionales de la contabilidad o el derecho, que presta servicios a diversos clientes externos, e “interno”: en una empresa u organización concreta. Los contables y los abogados también pueden trabajar de forma independiente.

Aunque existe una gran variedad de ingenierias y licenciaturas, te recomendamos investigar de manera adecuada que es una licenciatura y que es una ingenieria, esto para que tengas un panorama más amplio y sepas a lo que te enfrentas si es que te decides por alguna.

Al comparar tanto licenciatura en derecho como la licenciatura en contabilidad, ambas profesionales pueden ocuparse de los asuntos de las empresas y los particulares, se especializan en cosas diferentes: los abogados con los puntos de la ley y los procedimientos legales; los contables con los números, las normas fiscales y los códigos. Ambos campos requieren estudios adicionales y especializados más allá de un título universitario general, y la aprobación de un examen para recibir una licencia estatal para ejercer (no es obligatorio para todos los contables, aunque se recomienda encarecidamente). También debes de tomar en cuenta cuales son tus objetivos, cuales son tus habilidades y cuales son las aptitudes que debes de tener para poder estudiarlas y que el cursar esta licenciatura sea de lo más sencillo y practico para ti.

La carrera de contabilidad suele tener unos requisitos educativos menos amplios. Por otra parte, la de Derecho suele estar mejor pagada.

Alumnos en biblioteca

Conclusiones clave

Tanto la contabilidad como el derecho son campos en los que los profesionales pueden trabajar bien en una empresa de compañeros de profesión, atendiendo a varios clientes, o bien “en casa” en una única empresa u organización.
Ambas profesiones requieren estudios especializados y ofrecen títulos especializados, pero la carrera de contabilidad tiene menos requisitos educativos rígidos que la de derecho.
Para convertirse en abogado es necesario aprobar un examen de abogacía sancionado por el estado, que le otorga la licencia para ejercer legalmente. La mayoría de los trabajos de contabilidad, aunque no todos, exigen ser contable público certificado (CPA), lo que se consigue aprobando un examen estatal.
Por término medio, los abogados ganan más dinero que los contables, sobre todo nada más terminar sus estudios.

Contabilidad
Un contable puede trabajar en empresas que realizan trabajos de contabilidad y auditoría para diversos clientes externos; se conocen como empresas de contabilidad pública (no confundir con la administración pública, es decir, el gobierno o la administración pública). O pueden trabajar en una empresa, supervisando los libros y registros financieros como parte del personal de una empresa pública individual o de una empresa privada más pequeña. También pueden preparar declaraciones de impuestos para particulares y empresas o trabajar para el gobierno.

Los contables deben ser hábiles en el manejo de las cifras. A menudo se estigmatiza esta carrera como aburrida y como un refugio para los expertos en matemáticas y en números, pero muchas de las tareas contables requieren un gran don de gentes y diplomacia. Los contables públicos pasan la mayor parte de sus semanas de trabajo en las oficinas de varios clientes externos. Estos profesionales deben ser capaces de asimilar diversas culturas corporativas.

Muchas facultades y universidades ofrecen programas de licenciatura y máster en contabilidad. Para obtener 150 horas semestrales de formación, los estudiantes no tienen que obtener necesariamente un máster. Pueden cumplir el requisito a nivel de licenciatura o conseguir una licenciatura y tomar algunos cursos a nivel de posgrado. Algunas universidades ofrecen programas de Maestría en Contabilidad simplificados que le permiten evitar una licenciatura y recibir los créditos necesarios para la elegibilidad de CPA en un mínimo de cuatro años.

Derecho

Los licenciados en Derecho también tienen muchas opciones. Muchos jóvenes abogados prefieren entrar en un bufete privado, donde pueden especializarse en campos como la defensa penal, el derecho laboral y el derecho internacional. Otros optan por la vía interna, trabajando como asesores corporativos en una empresa concreta, especialmente si piensan que les gustaría pasar a la gestión empresarial. Y algunos trabajan para el gobierno o para organizaciones sin ánimo de lucro.

Alumnos en biblioteca

Para convertirse en abogado es necesario obtener una licenciatura y un título de doctor en derecho de una facultad de derecho, lo que supone un total de siete años de estudio a tiempo completo. Para ejercer la abogacía legalmente, los abogados también deben aprobar el examen del colegio de abogados del estado en el que quieran trabajar, ya sea en un bufete o en una empresa.

Los abogados requieren una amplia base de conocimientos que puede depender de la especialidad a la que se dediquen. El derecho corporativo requiere largas horas, tareas exigentes y una ética de trabajo incansable. Los abogados litigantes deben ser elocuentes, persuasivos y capaces de pensar sobre la marcha. Debe tener un buen conocimiento de varias culturas y hablar varios idiomas si quiere ejercer el derecho internacional. El derecho fiscal y otros campos jurídicos especializados pueden requerir una formación adicional más allá de la facultad de derecho.

El mayor problema del campo del derecho es la oferta y la demanda. Durante décadas, un título de abogado se consideraba un billete garantizado para una carrera bien remunerada. Como consecuencia, las matrículas en las facultades de derecho se dispararon, produciendo un gran número de licenciados en derecho que, en ocasiones, han tenido dificultades para encontrar un puesto de trabajo.